¡A todos nos pasa! De jóvenes pensamos que para tomar tequila hay que combinarlo con refresco de toronja. A veces nos atrevemos a tomar “shots” en reuniones con amigos (¡qué pena!), o bien, ya sin presiones empezamos a probar tequila en “caballito” y religiosamente lo acompañamos con sal y limón o hasta con un poco de “sangrita”.

Más tarde, muchas veces ya con un mejor ingreso y un paladar más experimentado, llega hasta nosotros un buen tequila reposado o añejo. De la mano de un auténtico experto en tequila aprendemos a apreciar correctamente las propiedades de este famoso destilado del agave azul Tequilana Weber, su color, cuerpo, aroma y sabor. Descubrimos que hay una variedad más amplia de sabores que pueden acompañar al tequila, entre ellas el chocolate.

Para mí, ese momento llegó cuando participé en una sesión de catado de chocolate con tequila en la Fábrica La Rojeña, localizada a unos pasos de la plaza central de Tequila, un pueblo mágico de Jalisco. Este precioso pueblito colonial se ubica a solo una hora de camino del centro de Guadalajara.

Antes de visitar Tequila por primera vez, yo me jactaba de “conocer” este destilado. Poco sabía de todo lo que me llevaría en conocimientos y experiencias de esta región de Jalisco.

¿Cómo maridar el tequila y el chocolate?

Todo empieza con un tour por la Fábrica La Rojeña. Catado Chocolate se llama esta aventura de Mundo Cuervo. Tiene lugar los lunes y los domingos en dos horarios, uno a las 11:00 am y otro a las 4:00 pm.

El Catado Chocolate y tequila incluye:

• Tour guiado por la destilería
• Visita a la cava Reserva de la Familia
• Cata con tequila Reserva de la Familia, Platino y Extra Añejo
• Chocolate riquísimo

Nosotros elegimos el horario vespertino para el catado de tequila con chocolate, pues mi novia y yo sabíamos que llegaríamos a Tequila desde Guadalajara pasado el mediodía. Al arribar a Tequila nos dirigimos de inmediato al restaurante La Antigua Casona, donde comimos como reyes.

Rumbo a las 4 de la tarde, luego de visitar la iglesia principal de Tequila, la Parroquia Santiago Apóstol, atravesamos caminando la plaza central del pueblito, nos detuvimos unos minutos en el kiosko para disfrutar el aroma a agave cocido que flota por todo el pueblo y después nos dirigimos a las puertas de la Fábrica La Rojeña, donde ya nos esperaban.

Empezamos haciendo un tour por la destilería, pasamos por los patios en los que se reciben los pesados corazones de agave que llegan sin cesar desde los campos localizados al pie del Volcán de Tequila. Vimos los grandes hornos de piedra donde se cuece el agave, observamos parte de los procesos de molienda y fermentación y también atravesamos el área donde se encuentran los enormes alambiques en los que se destila el tequila.

Cava Reserva de la Familia, ¡qué lugar!

Visitamos una antigua cava que antaño era de uso exclusivo de los miembros de la familia Cuervo. Hay que descender por una escalinata de piedra desde los patios de La Rojeña para encontrar este espacio privado que tiene una vibra casi religiosa.

Entre muros, columnas y arcos de piedra, protegidas por gruesos barrotes de hierro forjado se encuentran antiquísimas barricas y damajuanas que atesoran un tequila exquisito que tuvimos oportunidad de probar.

Catado Chocolate de Mundo Cuervo

Finalmente, entramos en una elegante salita privada ubicada frente a un precioso patio de estilo colonial. Nos acomodamos y encontramos frente a nosotros una serie de copas y muestras de distintas presentaciones de chocolate, desde granos de cacao tostado hasta barritas de chocolate artesanal, pasando por cacao molido y otras variantes de chocolate.

No entraré en detalles acerca de todo lo que disfrutarás y conocerás en esta experiencia, ¡no quiero “spoilearte”! Basta decir que para el catado chocolate dispondrás de tequila Reserva de La Familia, Platino y Extra Añejo y estos se funden mágicamente en tu boca con las notas amargas y dulces del chocolate, creando una serie de explosiones de sabor.

Cacao y agave, la pareja ideal

De vuelta en casa, hice mis propios experimentos y aquí te comparto mi hallazgo favorito.

¿Cómo maridar chocolate y tequila en casa?

Necesitas Tequila José Cuervo Tradicional Reposado y chocolate Turín 70% Cacao. Ambos los puedes comprar en tu supermercado más cercano.

1. Sirve un poco del destilado en una copa tequilera. Si no tienes una a la mano, una copa de vino o una de coñac servirán. Preferentemente, no uses un caballito.
2. Agitando levemente la copa, observa las “lágrimas” o “piernas” de tu tequila, son los aceites naturales del agave.
3. Con tu nariz contra el borde de la copa, aspira profundo y aprecia el aroma del tequila. El alcohol está presente, claro, ¿pero ¿qué más encuentras?
4. Da un sorbito a tu tequila, paséalo por tu boca y pásalo lentamente. Esto te permitirá dejar listo tu paladar para apreciar toda la gama de sabores de la experiencia.
5. Muerde un trocito de chocolate y deja que se derrita en tu boca, luego da un buen sorbo a tu tequila. ¿QUÉ TAL? Repite este último paso las veces que quieras.

El cacao y el agave, ambos elementos con cualidades muy valoradas por los pueblos prehispánicos de México, tienen derivados que se llevan sorprendentemente bien en el paladar. ¡Quién lo hubiera pensado!

Basta hacer un catado chocolate en la Fábrica La Rojeña en Tequila Jalisco y echar un vistazo a la historia y al campo jalisciense para que todo encaje, como las piezas de un delicioso rompecabezas.